jueves, 7 de abril de 2011

Capitulo 53. Reaccionando.

CAPITULO 52.
REACCIONANDO.
Bella Pov.
Alice decidió quedarse conmigo en la habitación, para no dejarme sola, en lo que Nessie salía fuera a ver que sucedía y por qué se escucharan esos ruidos, eran poco común aquel alboroto en una clínica.
_ ¿Qué sucede, Ali?... –dije preocupada, al no escuchar nada-.
_ Tranquila, Bella… -dijo Alice tomándome de la mano, dios ni siquiera podía mover mi cuerpo, es que estaba bastante adolorida-.
La puerta se abrió de golpe y vi a Carlisle entrar, yo y Alice lo miramos.
_ Isabella… tus padres han venido a verte…
Al escuchar eso el color abandonó mi rostro.
_ ¿Qué?... –dije en un hilo de voz-.
Carlisle se acercó y me tomó de la mano hablándome bajito y despacio.
_ Tu padre está un poco alterado, pequeña… no quiero que tú te alteres también… por lo que te pido que por favor no hagas ningún esfuerzo, ni siquiera me hables mucho… hazlo por tu bebé… ¿entendido?...
Mi corazón martillaba demasiado de prisa, necesitaba a Edward a mi lado, mi cara debía de ser un poema, ya que Carlisle y Alice me miraban preocupados, mi respiración agitada hacia que mi cuerpo adolorido me doliera aún más. Miré a Carlisle a los ojos y mi voz salió en un susurro entrecortado.
_ ¿Sabe Charlie que estoy embarazada?...
Sabía que algo no estaba bien, ya que Carlisle me miró con preocupación.
_ Edward… -dije tratando de sentarme en la cama y sentí mi cuerpo tensarse, mi cara se contrajo por el dolor-. Necesito a Edward a mi lado…
_ Lo recomendable es que primero hables con ellos a solas…
_ Eso ni lo pienses papá… -miré de golpe hacia la puerta y fue cuando vi a Edward entrar a grandes pasos a la habitación, yo lo miré y mis ojos se encontraron con los de él, él rápidamente se acercó a mí, y se acuclilló para que su rostro quedara a nivel del mío, yo lo miré a los ojos y él acunó mi rostro en su cara, yo estaba sentada en la cama-_ No temas nada… aquí estoy… enfrentaremos esto juntos…
Yo fruncí el seño al ver en la comisura de sus labios un color rojo tirando a morado, llevé mi dedo índice a él y Edward evadió mi mano, tomándola con la suya y apretándomela, ambos nos mirábamos a los ojos.
_ Bueno, vamos, Alice… -escuché decir a Carlisle-.
_ Edward… tengo miedo…
_ No tienes que temer, amor… recuerda que estamos juntos en esto…
_ ¿Papá te pegó?... –dije alarmada al caer en cuenta del golpe, Edward sonrió un poco-.
_ Tranquila… -él me miraba a los ojos y mientras llevó su mano derecha a mi bajo vientre para acariciar a nuestro bebé con ternura-. Te amo… los amo a los dos…
Yo con los ojos llenos de lágrimas le sonreí.
_ Yo también te amo, Edward…
_ Isabella… -mi cuerpo se tensó al escuchar la voz de mi padre en la puerta, Edward sin apartar la mano de mi vientre giró su rostro para mirar por enzima de su hombro a mi padre, yo asustada los miré, mi padre estaba parado allí, junto a mi madre, quien mirándome con dolor lloraba, la cara de Charlie fue la que me descolocó un poco, su mirada era de un dolor terrible, las lagrimas rodaron por mis mejillas, Edward seguía con su mano en mi vientre, solo sentía que lo acariciaba suavemente por enzima de la sabana. Mi corazón estaba quebrado, mi papá no decía nada, solo me miraba, sus ojos brillaban un poco. Se que estaba decepcionado de mí, debía reconocer que siempre había sido su consentida, no había cosa, que de niña le pidiera, que Charlie no me complaciera, su actitud para conmigo, había cambiado desde que los problemas con mamá habían comenzado, ellos, ambos me descuidaron demasiado.
_ Dios mi niña… -escuché a mi mamá acercarse a mí, mientras llorando me abrazó haciendo que Edward no tuviera otra opción que alejarse un poco de mí. Mamá me abrazó, yo cerré los ojos y también lloré con ella-. ¿Cómo te sientes?...
_ NO te preocupes voy a estar bien…
Reneé se apartó de mi, y delicadamente quitaba el pelo de mi frente y trataba de ponérmelo detrás de la oreja, mientras examinaba mi rostro, debía estar algo golpeada, porque ella mantuvo su mirada un buen rato en el golpe que tenía cerca de la boca. Yo evadí su mirada y miré a Charlie, quien seguía parado en el mismo sitio, sin ni siquiera moverse. Mi mirada fue a él, rogaba porque me dijera algo, aunque sea que me regañara.
_ Papá… Perdóname… -miré de reojo a Edward y vi como con dolor cerró sus ojos, sabía que estaba triste, volví a mirar a mi padre, quien lentamente comenzó a acercarse a mí, mi madre se apartó para permitirle que se me acercara, yo lo miraba, él se sentó en la cama, a la altura de mi cintura, sin apartar su mirada de mis ojos-. Papá…
_ Dios, mi niña… te juro que voy a matar a ese imbécil… no debió ponerte un dedo enzima… y mas aún cuando yo pensaba que te estaba cuidando… pensé que debía estar tranquilo porque él estaba en donde tu estabas, cuidándote…
Mis lagrimas corrieron por mis mejillas, y sin poder controlarlo los sollozos salían de mi pecho, un poco fuerte, lo que hacia que mi cuerpo se agitara y doliera, pero no podía controlarlos, sentí una mano acariciar mi cabeza… y de momento los brazos de mi padre abarcaron mi cuerpo en un abrazo reconfortable. Lloraba en el pecho de mi padre.
_ Perdóname tu a mí, por no cuidarte como debía, princesa… siento que te he fallado… te juro que Jared va a pagar por todo esto…
_ Gracias, papá…
Charlie me mantuvo abrazada hasta que mis sollozos fueron calmándose, la verdad la opresión en mi pecho fue calmándose al cabo de más de veinte minuto. Ya calmada, papá me soltó, mis ojos debían estar horribles, al liberarme del consuelo de mi padre lo primero que hice fue buscar a Edward con la mirada, allí estaba al pie de la cama, con los brazos cruzados sobre su pecho, con su mirada fija en mí, lo ví y sin poder evitarlo le tiré un rápido vistazo a su físico, su pelo estaba mas revuelto que siempre, era caso perdido, pero igual me encantaba, sus ojos del verde esmeralda mas hermoso que hubiera visto nunca, estaban algo tristes y pendientes, estaba súper hermoso, a pesar de sus amorataditos en el labio y otro mas ligero cerca del ojo, se veía hermoso, busqué sus ojos y este me miraba fijamente a los míos, al parecer papá notó como miraba a Edward ya que él giró un poco su rostro para mirarlo sobre su hombro, debido a que Edward estaba detrás de él, al volverme a mirar, noté su cara de rabia.
_ Isabella… -dijo él entre dientes, conteniendo la rabia que llevaba dentro de sí-. Necesito que te regreses con nosotros a Florida… -yo lo miré de golpe, papá continuó-. No importa que estés embarazada, sabes que con nosotros, ni a ti y ni a tu bebé les faltará nada, te apoyaremos con tal de que continúes con tus estudios…
_ Bella no va a ningún lado… -escuché la voz de Edward, estaba súper furioso, yo lo miré a él, suplicándole con la mirada que no complicara las cosas, papá lo ignoró por completo-.
_ Tu madre y yo te cuidaremos, y le daremos todo lo que necesite el bebé…
_ MI BEBE no necesita absolutamente nada de ustedes… yo puedo darle todo lo que necesita, tanto a él como a Bella… -dijo Edward demasiado molesto-.
Aquello hizo que papá se parara de golpe y se abalanzara sobre él, agarrando con sus puños la franela de Edward sobre su pecho, lo zarandeó varias veces con rabia yo me senté de golpe en la cama, sin darme cuenta dejé salir un jadeo por el dolor, ellos ni cuenta se dieron, noté que Edward con rabia se safó del agarre de mi padre.
_ ¡Eres un muchacho… ¿Qué le puedes ofrecer?... si fuiste tan irresponsable que hasta la embarazaste!... –dijo Charlie con rabia-.
_ ¡Papá!... ¡No culpes solo a Edward, él tampoco me violó!...
Papá me miró de golpe, con una mirada amenazadora.
_ No estoy de acuerdo con todo esto, Bella… -me dijo mirándome fijamente a los ojos-. No te apoyo en esto, eres una niña que apenas empieza a vivir la vida, aún te falta mucho por recorrer, no es el mejor momento para tener un hijo…
Yo abrí los ojos como platos al entender lo que él me decía, Edward también abrió los ojos de golpe ante la sorpresa. Mis manos fueron a mi vientre, como si lo estuviera protegiendo de mi padre, mi voz también salió amenazadora. Sus palabras no me iban a amedentrar.
_ voy a recorrer lo que tenga que recorrer con mi bebé, papá, no te preocupes por mí… voy a seguir adelante… con Edward…
Lo miré mientras decía su nombre y mi corazón se llenó de alegría al ver su forma de mirarme, él también estaba feliz.
_ Bien… -dijo Charlie de manera molesta-. Voy a hospedarme en casa de Billy hasta que resuelva lo de Jared, tu madre se quedará conmigo…
_ Nooo… -dijo Reneé angustiada-. Yo me quedaré a pasar la noche con Isabella…
Yo la miré de golpe, le agradecía su atención, pero en verdad con quien quería pasar la noche era con Edward.
_ No mamá, ve con papá… aquí no descansarás muy bien… además Edward se quedará conmigo…
_ Nooo, pequeña… -dijo mamá y fue cuando me percaté que estaba llorando demasiado-. Quiero quedarme contigo… no me prives de esto…
_ Mamá… -dije con preocupación mientras extendí las manos lo más que pude para que me diera la de ella-.
Nessie Pov.
Estábamos sentados en la salita de espera, afuera de la habitación de Bella, todos, y cuando digo todos, me refiero a Jake, Emmet, Jasper, Alice y yo. Estábamos parados, Jake y yo, quienes estábamos recostados de una pared, mientras los demás, estaban sentados en la filitas horizontales de sillas.
_ Este es el colmo… -escuché a Jake a mi lado, susurrar consigo mismo, pero había tanto silencio que todos lo escucharon y lo miraron, fue en ese momento que me percaté que por su cara estaba bastante enojado-.
_ Tranquilo, Jacob… es normal que los padres reaccionen de esa manera cuando sus hijos adolescentes meten la pata… -dijo Alice, Jake la miró-.
_ No entiendes, Alice… Tío Charlie es un bruto… -dijo Jake molesto-. ¿Cómo se le ocurre reaccionar de esa manera?... no es como si Edward me diera pena… pero… el pobre desde que conoció a Bella solo a tenido que lidiar con todos sus problemas… no es justo que Charlie le haya golpeado… Edward solo le ha hecho bien a mi prima… ustedes no se imaginan lo bacía que estaba Bella de hace un tiempo para acá…
_ Me imagino… -dijo Emmet demasiado pensativo-. Si ese animalazo era su novio, la pobre es mas cuerda de lo que debería… nunca podré borrar de mi cabeza la imagen de ese chico golpeando a Bella de esa manera… -Emmet al decir eso, de manera brusca se puso de pies chocando su puño cerrado con la palma de su mano, su rostro fue de rabia, todos lo miraban asombrados por su cambio de actitud tan drástica-. Insisto… deberíamos pasar a Cuidados Intensivos y volverle a dar su merecido…
_ Tranquilo, Emmet… -dijo Jasper bastante serio-. Creo que ese mal nacido recibió su merecido… tardará bastante en salir de allí… de no ser así… tendremos que volver a unir fuerzas y volverlo a internar…
_ ¿Aún están adentro?... –todos nosotros al mismo tiempo miramos a papá, quien se acercaba al grupo. Con su bata blanca muy atractivo-.
_ Si… -dijo Emmet-.
_ ¿Edward también?... –dijo Carlisle preocupado-.
_ Si… -contesté yo-.
Papá tomó aire suficiente por la nariz y la votó por la boca. En ese momento todos giramos nuestros rostros hacia la puerta de la habitación en donde se encontraba Bella, Edward salía de allí, me fijé detenidamente en su actitud, estaba totalmente rígido y en su rostro se notaba que estaba bastante molesto, todos miramos como cerró la puerta detrás de el, y se recostó de ella, estaba perdido en sus pensamientos, ni siquiera se percató que todas nuestras miradas estaban fijas en él, su mirada estaba hacia el frente, perdida en la nada, sus ojos reflejaban el cansancio y la angustia, mi pecho se contrajo al ver a mi hermano en ese estado, y mis ojos se cristalizaron sin poder evitarlo, papá dio tres pasos y se acercó a él, poniendo su mano en el hombro de él.
_ Tranquilo, hijo… no es nada que no se pueda solucionar…
Edward frunció los labios, sin salir de la burbuja de sus pensamientos.
_ Ven… vayamos al consultorio… igual, necesito hablar contigo…
_ No papá… no voy a dejar a Bella sola… -dijo mi hermano mirando a papá fijamente, dejándole claro que nadie lo movería de allí-.
_ Descuida, amigo… -para mi sorpresa quien le habló fue Jasper-. Bella no va a estar sola… nosotros estamos aquí… y no nos moveremos hasta que tu regreses…
_ Seguro… puedes ir tranquilo… -dijo Emmet de manera firme-.
_ Vamos, Edward… -dijo papá agarrándole un brazo y haciéndolo caminar. Edward se fue con él-.
Bella Pov.
Papá seguía furiosísimo. Sabía que Edward debía estar súper molesto conmigo, por haberle pedido que se marchara un momento, sin imaginarse lo desprotegida que me sentía cuando estaba sin él. Sentía la caricia de Reneé en una de mis piernas por enzima de la sabana, ella estaba sentada a mi lado, estaba en silencio, aunque las lagrimas no paraban de dejar de caer de sus ojos, en cambio, papá seguía en la actitud molesta al pie de la camilla.
_ Mamá, no sigas llorando… estoy bien… -le dije entre dientes-.
_ Lo dices porque no te has visto en un espejo, pequeña… nunca te había visto tan pálida como luces ahora… -dijo mamá-. Estás tan delgadita, que me da miedo…
_ No exageres, mamá… -dije con fastidio, fue cuando escuché el tono sarcástico de Charlie-.
_ Si, Renée… no molestes… solo está "Embarazada"…
Yo y Reneé le miramos al mismo tiempo.
_ Papá, yo…
_ No te entiendo, Isabella… -dijo Charlie molesto-. ¿Viste lo que conseguiste por tu terquedad en quererte quedar en los Ángeles?... si te hubieras marchado conmigo no estuvieras en ese estado…
_ Por supuesto que no, papá… -dije entre dientes, me molestó su actitud, ¿acaso nunca se percató de lo mucho que sufría cuando estaba en Florida?... mi vida era un puro y grandísimo infierno-. Estaría muchísimo peor…
_ ¿Peor, dices?... –dejó salir su rabia, mamá lo miraba fijamente-. ¿Qué futuro crees que le esperan a ese muchacho, a ti y a ese niño que esperas?... me apuesto que ese chico en su vida, ni siquiera a trabajado, tú tampoco, es que ni siquiera han terminado la preparatoria… ¿piensan irse a estudiar a la universidad con un niño a rastro, ¿o que piensas hacer con él?... ¿dejárselo a los padres de él, mientras ustedes estudian?... porque lo único que no quiero imaginar, es que tus estudios llegaran solo hasta la preparatoria, no era esa clase de futuro que esperaba para mi única hija… he dado en mi vida todo por ti, y mira como me pagas, tronchándote el futuro de una manera tan terrible, un hijo no es un juego, no es una cosa para divertirse, es una responsabilidad muy delicada… a la que imagino que ninguno de los dos está preparado… fueron irresponsables.
_ Papá, siento haberte defraudado, pero la verdad es que no me arrepiento de que las cosas estén ocurriendo de esta manera, la verdad eres mi padre, te amo y necesito tu apoyo emocional, pero si no puedes dármelo, lo siento… -dije con el corazón comprimido y las lagrimas saliendo por mis ojos, me dolía mucho la actitud de mi padre-. Yo… y Edward saldremos adelante con nuestro bebé… no importa que nunca hayamos trabajado, ni nada… igual nos amamos y amamos a nuestro bebé, es lo único que nos importa, lo demás no me preocupa…
_ Veremos a ver si sigues pensando lo mismo, cuando a ese chico se le pase ese enamoramiento de juventud y se de cuenta de la metida de pata que ha dado…
_ ¡Maldición papá, estás equivocado, mi bebé no es ni un estorbo ni mucho menos una metida de pata!...
_ ¡Te callas!... –gritó Charlie mas fuerte aún-. ¡A mi no me gritas, Isabella, no me importa que estés embarazada, no te voy a permitir que me faltes el respeto!... ¡Espero que si esto se trata de que debes madurar, pues que lo hagas, con mi apoyo moral ni cuentes!...
Y muy rabioso se salió de la habitación, golpeando la puerta bastante fuerte después de salir, mi corazón golpeó fuertemente mi pecho, y luego se contrajo, sin poder evitarlo mis lágrimas comenzaron a salir, mamá rápidamente me abrazó, para consolarme.
Edward pov.
_ Debes tranquilizarte, Edward, es normal que su padre haya reaccionado de esa manera…
Yo furioso caminaba en el consultorio de mi padre de un lado para el otro, admitía que debía tranquilizarme, esto no me llevaría a nada bueno. Al escuchar a mi padre decir eso me molesté bastante y le miré con rabia.
_ Ustedes son mis padres y NO reaccionaron de esa manera, ese tipo es un animal, ¿acaso no se fijó lo mal que está Bella?...
_ Si, hijo… pero es que no todos reaccionamos de la misma manera, ese señor no te conoce… cuando vea que en realidad amas a su hija, y que eres un buen muchacho, los va a apoyar…
_ NO necesitamos su apoyo…
_ Isabella si… es su padre y recuerda que ella no se sentirá bien si él no los apoya, aunque sea emocionalmente… debes tratar de buscarlo y hablar con él, hijo… recuerda que es importante para ella…
Sabía que papá tenía razón. Me senté en el mueble, y traté de tranquilizarme, papá aprovechó para hablarme lentamente.
_ Edward… vas a tener un hijo y hay cosas que debes pensar y programar… -yo lo miré-. Se que cuentas con suficientes ahorros para sacar adelante a tu familia hasta que te gradúes… pero lo importante para mí… es que continúes con tus estudios…
_ Por supuesto… estudiaré medicina, padre… -vi a Carlisle sacar una sonrisa de satisfacción-. Bella estudiará lo que quiera… nos casaremos y nos iremos a estudiar en la universidad que ella guste, hablaré con nana, para que nos ayude con el bebé… dudo que se me niegue… estaré sumamente tranquilo de saber que ella se quedará con el bebé mientras Bella y yo estemos en la universidad…
_ Waoo… -dijo Carlisle sorprendido-. Veo que te lo has pensado todo… igual no conoces muy bien a tu madre, estoy seguro que la distancia, no será problema para que pase tiempo con su nietecito(a)… Esme esta muy emocionada, con decirte que anoche estuvo hablando hasta el cansancio con respecto a los planes…
_ Gracias por su apoyo, también pienso hacer algo… trabajar…
_ O no, eso si que no… yo te voy a estar ayudando… mientras mas rápido termines la carrera de Medicina, mas rápido podré tomar un descanso… así que debes apurar…
Ambos fuimos interrumpidos por el teléfono, vi a Carlisle darle a un botón, y de inmediato escuché en alta voz la voz de su secretaria.
_ Dr. Cullen… le llaman de Enfermería de Sala de Internamiento… dicen que es urgente…
_ Pásame la llamada, Kate…
_ Línea 4, Dr.
Yo fruncí el seño cuando vi a papá, darle al número 4, enseguida se escuchó la voz de una mujer algo desesperada.
_ Dr. Es la enfermera de la sala 5… hay una paciente embarazada, que está presentando problema… no sabría si se trata de una amenaza de aborto, pero ella se queja de un fuerte dolor en el bajo vientre…
Papá y yo nos miramos de golpe.
_ ¿Qué habitación?... –dijo mi padre de inmediato, mientras se ponía de pies-.
Al escuchar el número yo como loco salí corriendo de la habitación.

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